dijous, 16 de gener del 2014

Mirar a los ojos de la muerte

Se ha liado en la USA... unos columnistas critican a una mujer que ha decidido exponer intensamente (blog y twiter) su proceso de tratamiento y vida durante la fase 4 (metástasis) de su cáncer de pecho.

La acusan de abusar de tratamientos médicos cuando ya está 'desahuciada', de sacar beneficio personal de su posición como persona pública. Cuestionan su insistencia por vivir (y los costes médicos que ello comporta) y la comparan con la decisión heroica (y más barata) de morir plácidamente. Opinan que su omnipresencia en la red le ha dado sentido y control a su vida y que le sirve a ella como 'auto-medicación' y al hospital como fuente de ingresos para la investigación.

Más allá de estas cuestiones, y de la obscenidad de que unos periodistas decidan juzgar lo que una persona decide hacer con su vida y su muerte, se me plantea otra cuestión:

Las narrativas rosas del cáncer esconden las realidades de las personas que viven procesos terminales. Ellas, las que transitan entre la vida y la muerte, nos confrontan con nuestros propios miedos.

La vulnerabilidad y la muerte nos aterran y la performatividad de la vida en el abismo- el acecho de la inmediatez de la muerte- son procesos, claramente, demasiado intensos para presenciar.  Nuestros cuerpos y emociones se intensifican con el miedo, se retuercen, gimen, gruñen. Una orgía de vida y de muerte. 


Vamos a seguir apartando la mirada?









Aquí algunos artículos que han aparecido esta semana sobre el tema:

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada